Martes 10 Marzo
Mateo 23, 1-12
~ El mayor entre ustedes será su servidor.
Pues el que se ensalce, será humillado;
y el que se humille, será ensalzado ~
En el ejercicio de nuestra fe, puede suceder que tarde o temprano, busquemos ocupar la cátedra. Es decir, lleguemos a creer que somos maestros o guías; al modo de los escribas y fariseos.
Sentarse en la cátedra, igual a ellos, es incompatible con el cristianismo. Porque buscan solo el prestigio y el poder. Ejercen una autoridad institucional, que la mayoría de las veces no es congruente con su vida. No tienen autoridad moral.
Nosotros podemos sentarnos en la cátedra; pero al modo de Jesús, no con la autoridad que viene de la sola ley, sino la que resulta de la congruencia de nuestra vida.
El más alto rango lo ocupan los discípulos: quienes escuchan y acogen la Palabra, quienes se convierten en servidores de los demás y se tienen por iguales entre ellos. Quienes no buscan dominar con la doctrina, sino servir.
¿Cuánta autoridad tienes?
Oración:
Señor Jesús, nada deseo más que seguirte. Quiero ser libre de los condicionamientos de dominio y de poder. Ayúdame a invertir esta actitud equivocada, por la de la escucha de tu Palabra.
Que junto con mi familia, acojamos tu Palabra y hagamos de nuestra vida un continuo servicio y amor a los demás. Amén.