Vivamos De Manera Diferente…
Santa Teresa de Jesús
Viernes 20 Octubre
Lucas 12, 1-7
~ Nada hay escondido que no llegue a ser descubierto,
ni nada oculto que no llegue a saberse ~
La levadura de los fariseos, que es la hipocresía, paraliza y engaña. Los fariseos parecen personas honradas por fuera, pero tienen el interior corrompido. Es que este mismo proceder engañoso de ellos se infiltra en quienes se dejan manipular, como una mala levadura que crece hasta corromper su interior. Al final, aquellos que se dejan seducir por los fariseos acaban siendo como ellos; y lo peor de todo, sin capacidad para liberar el don de Dios y su presencia en el interior de sus personas.
Esta advertencia de Jesús a sus discípulos es, al mismo tiempo, una invitación a vivir de Él y de su proyecto, a ser transparentes y libres; en una palabra, a vivir de manera diferente; y a no permitir que nadie les corte las alas, que nadie les quite la certeza de lo importantes que son para su Padre Dios.
Nosotros estamos llamados, de igual modo, a vivir en coherencia con el mensaje de Cristo que hemos recibido; es la única forma de no engañarnos. Lo contrario sucede cuando hacemos de la religión una serie de códigos externos para no comprometer nuestros mezquinos intereses; nos volvemos truculentos, falsos o, como ha dicho Jesús, “hipócritas”; le quitamos a Dios la posibilidad de amarnos y de expandir nuestra experiencia interior de libertad, de alegría y de amor.
El miedo de los discípulos a la persecución, a pensar diferente y a vivir con nuevas categorías puede ser nuestro mismo temor. Porque nos acostumbramos a una religión de uso y de cumplimiento. No obstante, Jesús nos invita a descubrirnos amados por Dios, y si esto es verdad, a vivir como Hijos suyos, con transparencia, sin doble cara, haciendo posible que lo que decimos en el interior de nuestro corazón sea escuchado por todos, incluso gritado desde las azoteas. Aunque parece exagerado, en verdad no lo es. Podemos vivir sin secretos, y más aún cuando nos descubrimos amigos de Dios.
Vivamos de manera diferente, es decir, sin miedos y de acuerdo con el mensaje de Jesús. Lo demás es una levadura de corrupción que acabará por destruirnos.
Oración:
Señor Jesús, muchas veces he sido “hipócrita”, igual que los fariseos. He pretendido engañarte, como si tú no pudieras leer mi interior; por fuera he aparentado ser honesto, y sin embargo, por dentro, más de alguna vez me he corrompido. Deseo ser libre, vivir sin prejuicios ni condicionamientos sociales ni religiosos. Abre mi confianza y mi inteligencia para sacudirme el temor a tu vida nueva, a lo trascendente. Hazme experimentar que soy amado y cuidado, tanto o más que los pajarillos del cielo.
Permite que en casa, con los míos, hagamos de nuestra existencia una historia diferente, abierta a tus sugerencias de vida y de amor; y en la plena confianza de que tú siempre estás con nosotros y que jamás nos arrojarás a la gehena. Amén.